Este componente representa la fase propositiva y transformadora dentro del proceso de autoevaluación, en la cual se concreta el compromiso institucional con la mejora continua. A partir del análisis crítico y reflexivo realizado en los componentes anteriores —especialmente aquellos orientados a la verificación y evaluación del comportamiento de los datos y evidencias recolectadas—, se formulan planes de mejora estructurados y pertinentes. Este componente se enfoca en la creación, desarrollo y puesta en marcha de dichos planes, que contienen acciones específicas orientadas a superar debilidades, potenciar fortalezas y cerrar brechas identificadas. Además, ACTUAR contempla el seguimiento sistemático de las actividades propuestas, garantizando la trazabilidad, la evaluación de resultados y la realimentación del ciclo de calidad. En este sentido, no solo impulsa el cumplimiento de metas, sino que también fortalece la toma de decisiones informada, la responsabilidad institucional y la consolidación de una cultura de mejoramiento continuo en los programas académicos.